miércoles, 7 de noviembre de 2007


Aunque hoy ya he hecho otra entrada a propósito de las Jornadas de Caza, quería escribir muy brevemente sobre otras dos cosas, sin ninguna relación con lo anterior.


La primera es que he visto y oído a Aznar en la tele, con su cautivadora sonrisa semivertical, aludiendo a la sentencia del 11-M y sobre los "inductores" del mismo. Me parece que está teniendo el mismo ojo que cuando vio las armas letales de Irak. Y no digo más, porque ya huele...




Lo otro que quería comentar, es que hoy he ido con mi amigo JoséFermín a visitar el Monasterio de Cañas. He tenido la suerte de poder verlo detenidamente y de compartir unas horas con el padre Félix, ¿abad? benedictino e incluso comer con él. El monasterio, que yo sólo conocía de puertas afuera, merece la pena visitarlo. Creo que debe ser una visita obligada para enseñar a todo el que no lo conozca, con una iglesia, un museo y un cuarto de reliquias magníficos. Además, concretamente en estas fechas donde rebosan colores, una situación maravillosa que sugiere una paz interior a los que estamos muy faltos de creencias.




La comida ha consistido en una exquisita crema de calabaza, espaguettis con chistorra, carne guisada con pimientos verdes y arroz con leche. Hemos bebido una botella de vino del Club de Cosecheros de Rioja Alta (ha sido nuestra aportación), café y un chupito de un licor cisterciense. Luego hemos comprado pastas variadas y rosquillas, y tras ver unas cuantas magníficas obras de la biblioteca, concretamente un maravilloso facsimil del atlas de Tolomeo (?) del siglo I-II, y de darnos un pequeño paseo, nos hemos vuelto a Logroño a seguir nuestra vida menos ascética.


1 comentario:

pjdfp dijo...

Hola Victor:
Acabo de bien comer en un restaurante que hay al lado del trabajo, de cocinero navarro y cocinera germano-francesa, hacen menús caseros y es bastante acogedor. No me he quedado con hambre (el segundo plato era espalda de cordero), pero a pesar de todo he leido tus dos últimas entradas en cuanto he vuelto a la oficina y la boca se me ha hecho agua.